jueves, 11 de febrero de 2010
ALGUNOS POEMAS RECIENTES Y UNO ANTIGUO
UNA NOCHE
Las estrellas chocan contra mis ojos
Mis ojos chocan contra la oscuridad
La oscuridad lo es todo en ausencia de estrellas
Una mano surge de entre la oscuridad
conteniendo en su puño las estrellas y mis ojos
Es en este instante preciso
Cuando el mundo calla
Y espera escuchar mi respuesta
Las nubes se retiran
Para que el eco de mi voz
No las destruya.
LEONORA CARRINGTON
A ti te gustaba robar melones, Leonora
También te gustaban las historias extrañas
A nosotros nos gustas tú
Porque estabas loca y
Era maravilloso
Cómo nos hablabas
De dilemas, derrumbes y de llevar sombrero
Del cimbreo de los pasos
Y de la culpa de ese cimbreo
Leonora
Bajabas a tientas las escaleras
Y a cada paso te enfrentabas a la oscuridad
¡Qué terror avanzar!
Pero temías mucho más quedarte quieta
Y que el presente te detuviera
En un momento eterno
En el momento exacto de un parpadeo
Eso sería como estar muerta
Tú descendías
Bajabas las escaleras
Para saber qué se escondía allí
¡Ay, chiquilla! qué mal pagado
Está el oficio de explorador
Leonora
Te amamos.
MARQUÉS DE SADE
¡Ah, Marqués de Sade!
Jugaste duro
Pero te esperaban escondidos
Nos enseñaste a lanzar pétalos de rosa
En el abismo
Pero no era eso lo que querías decirnos
Tú querías enseñarnos los agujeros negros
El infinito expandiéndose
Que no es otra cosa que nosotros mismos
Hechos de la misma materia
Como los polvos del tocador
¡Ah, querido Marqués!
Usted debía haber viajado en cohete
Y desde la estación espacial
Derramar su semen
Y azotarnos un poquito
Porque no comprendemos
No entendemos
Que el agujero del culo es mucho más
Es un truco filosófico
Es un alfiler que sujeta el mundo
Sade, Marqués
Perdiste estrepitosamente
Te comieron la tostada
Tu semilla del mal
Tu enseñanza del reverso
Tu nombre
Pasó a ser una entrada en la Enciclopedia
Muriendo sin significado.
NOTA FICTICIA DE CIRLOT A IJON TICHY
Amigo Tichy:
Si usted se identifica con las estrellas es que usted se identifica con la posibilidad reservada sólamente al elegido.
Si fuéramos arrogantes diríamos con Mitra que somos la estrella que camina entre ellos y brilla desde lo hondo mientras nos colgamos los siete collares planetarios. Pero usted se conforma con una piedrecilla o cualquier otra insignificancia como prueba de que estuvo allí, de que todos estuvimos allí, aunque siempre permanezcamos. Usted es como otro Baron de Münchhausen al que necesitamos creer, por que ¿Qué sería del mundo sin los viajeros y los fabuladores? Sin duda un mundo lleno de bestias incapaces de comer flores.
Usted sabe también que la estrella llameante es el símbolo del centro, de la fuerza del universo. Aquí y allá, en todos lados, y a veces en ninguno. Como las estrellas que desaparecen durante el día (puedo escuchar aquí las risotadas de la audiencia ante tamaña mentira).
Pero bueno, usted tampoco ignora que el universo es en tanto que nosotros somos, aunque se haga líos con sus yoes del martes, del lunes o del jueves próximo. Usted sabe que al final conseguirá arreglar el timón. Y si no lo consigue tampoco pasa nada, la paradoja espacio-temporal lo salvará.
Querido amigo Tichy, yo creo en sus piedrecillas.
TU DOMINIO ESTÁ EN TODAS PARTES
Tu dominio está en todas partes
Tu palacio está construido en el umbral de la puerta
pero si lloras se cerrará ante tus narices
Tus lágrimas no conmueven al constructor
sólo tus puñales
Pero debes comprender bien
qué cosa es un puñal
Nunca es aquello que tú crees
Ahora bien, tú nunca crees en nada
ni en puñales
ni en lágrimas
ni en constructores
ni en umbrales de puertas
Por eso nunca tendrás un palacio
Por eso nunca estarás en todas partes.
CORRESPONDENCIAS
Si las estrellas titilan
es que algún dios anda con pleitos
Si algún dios pleitea
es que algún árbol ha sido abatido por el rayo
Si los rayos abaten árboles
es que alguna mano se ha cerrado
Y es que las manos cerradas
abaten rayos
y pleitean con dioses
rayean árboles y diosean abatimientos
Pero a ti nada de eso te importa
A ti lo que te gusta es la noche cerrada
alumbrada por una sóla estrella
y gritarle al rayo
y decirle a los dioses
que tú eras un árbol.
CORRESPONDENCIAS II
Cuando parpadeas alguien muere al otro lado del teléfono
Cuando hablas tu lengua provoca maremotos
Cuando mueves tus brazos el viento se detiene
y cuando respiras tu pecho destruye una montaña
Cuando tu vientre se sobrecoge alguien cree en creer
Cuando tus caderas se contonean algún artista deja de creer
Cuando tu espalda se arquea lo continuo cae en su propia trampa
y cuando tus piernas caminan lo discontinuo se precipita en su propia pereza
los artistas parpadean al otro lado de la pereza
los maremotos son trampas para el viento
y el viento se precipita en las montañas.
EL FIN DEL MUNDO
La piel es el envoltorio de una tumba
Decías
Y te dejabas caer contra la pared
Nunca lo hacías para descansar
Sino para atrapar tu sombra
Fuera caía la lluvia
Y a ti te gustaba sentir la melancolía
Y decir aquellas cosas tan duras
Tu suerte se agitaba en la noche
Y preguntabas
Cómo se puede amar lo que no vive
Y corrías a atrapar la sombra
Y corrías a la ventana
A ver llover
Decías que mentirías para salvar el mundo
Y que morirías en el mundo
Al que no podías mentir
Soñabas con caminar sin miedo
Sin vergüenza
Sin dobles que nos miren de frente
Sin tener que decir aquellas cosas
Tan duras
El trueno y la noche brillaban
Cuando escuchaban tu voz
Y todo caía destrozado
Sin embargo la sombra seguía en pie
Y todo volvía a empezar
Una lámpara de angustia
La noche ahogada
Y el vuelo en la bruma
Tomar temblando unos senos de estatua
Y quedarse clavado en el silencio
Con la lluvia fuera
Y los charcos de melancolía dentro
Con nuestras vidas prendidas en alfileres
Con los ángeles llorando por unas caricias
Con nuestras sombras en la pared.
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2 comentarios:
Encantadores escritos, mucho ánimo que tienes muy buena punteria.
Casi me he leido todo el blog, y te agradezco la recopilación, pero me ha sorprendido gratamente encontrar estas pequeñas joyas de parte del autor, gracias!
Muchas gracias Aarón, es todo un honor.
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